Servir dónde uno sea más útil.

Dejar atrás  la casa, la  familia,  los hijos, aún más cuando estos son  pequeños e  inscribirse  como voluntario  para prestar  servicios en la limpieza e higienización , el lavado de ropa,  o la elaboración  y distribución  de alimentos en un centro de aislamiento que por demás recibe a personas  positivas de bajo riesgo  al virus del SARS COV -2  es una decisión de valientes, pero patentizan  disposición  trabajadores de varios sectores  como símbolo de apoyo  y  solidaridad. 

Yoslaidys   Fernández Toledo y Jaile Rizo García, son dos  de esos voluntarios, trabajan  en el centro de aislamiento o hospital de campaña que funciona en  la escuela especial, “Juan Manuel Fernández  Duque”, del municipio de  Colón, ambos conversan poco, pero  trabajan mucho y sienten como importante su tarea, ella permanece  en la entrada  de la institución ,  es la  encargada   de atender  y aplicar soluciones  desinfectantes  a todo el que entra  y sale, utiliza y emplea  todos los medios de protección para  cuidarse y evitar  contagiarse,  pues en el hogar  la espera su niño  pequeño y toda la familia. 

 Jaile es trabajador del policlínico “Carlos Juan Finlay”  pero desde que comenzó  la pandemia  se alistó  como voluntario, primero,  en la antigua escuela de enfermeras en la  lavandería  y ahora aquí con su mochila,  fumiga todas las áreas del centro, se necesita – explica- mucho rigor y cuidado sobre  todo en las habitaciones  donde permanecieron pacientes positivos, esa es la labor diaria, reafirma que los de casa  solo le piden  que se cuide mucho.

 

De este trabajo recompensa,  el criterio  de los pacientes   ingresados como Daysi Lazo, quien emocionada recibe el  alta  médica y de  regreso al hogar expresa sobre las buenas atenciones por el personal médico, destaca la limpieza,  la calidad de la comida y  agradece a todos sin distinción.

  Personas sencillas impregnadas de valores  y con el compromiso de ser útil donde más necesario sea,  se  alistan en los centros de aislamientos - la mayoría  centros educacionales  acondicionados  para la atención de  pacientes  contagiados  o sospechosos del nuevo coronavirus-  una actitud altruista que no  delimita edad, profesión ni  oficios.