Cada persona que vivió la experiencia de estar becado recuerda con amor y cierta nostalgia esta época sobre todo por la relación que se establece como adolescentes con el resto de los estudiantes.
Para muchos, como para mí , fue la primera vez lejos de casa, lágrimas, la comida no cocinada por mi mamá que sabia sortear los mas dificiles gustos, el estudio individual, la tía que ayudaba en todo y hasta el primer novio o enamorado.
Lo cierto es que la beca era otra cosa , era el preludio de una libertad anticipada sin los ojos de los padres prohibiendo algo y la forma de arreglarselas como pudieras, claro siempre ante el cuidado de los profesores atentos siempre hasta de una tos persitente, una fiebre que no bajaba ,para inmediatamente asumir el rol de padres.
La beca es una de las mejores experiencias de la vida y ahora que los domingos en la tarde en el parque La Libertad de mi ciudad de Colón , parten las guaguas repletas de muchachos y muchachas sonrientes- aunque solo hayan pasado el fin de semana en casa-se ven seguros de forjar su futuro como lo hicimos un dia nosotros, asegurando una profesión , en escuelas que no han cambiado el nombre en muchos casos , a prueba de tiempo, reparaciones y pinturas para lucir más bellas y confortables pero con la misma esencia , preparar para el mañana.
!Entonces es asi como me acuerdo de mi beca y lo tanto que significó para lo que soy ahora!
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